diciembre 10, 2011

Desnuda

Este último mes descubrí que ando desnuda por la vida, con la carne expuesta, con el alma libre.

De la mano de esa libertad recién reconocida se me cayeron los filtros y vi también que nadie puede llegar a ser lo que realmente no quiere aunque lo crea, si permanece abrazado por sus miedos,
con los ojos velados  por su ego.

Y a su vez de la mano de esa mirada tan limpia me di un golpe, sin heridas. Tampoco puedo pretender ser para otros lo que ellos no quieren de mi, ni pedir que sean para mi lo que no están preparados para ser o simplemente no les interesa.

Ya no me reivindico, ni tampoco  reivindico a nadie.

Estoy, fresca, libre, enamorada de la vida y del amor, siendo libre y dejando ser, en libertad.